01 Feb Gran trabajo de Mateo Llarena y Performance Tech en las 24 Horas de Daytona
El piloto Guatemalteco Mateo Llarena completó el reto de las 24 Horas de Daytona junto a sus compañeros de equipo Cameron Cassels, de Canadá, Rasmus Lindh de Suecia y Ayrton Ori, de Estados Unidos, una carrera que para el cuarteto de jóvenes corredores tuvo un sabor agridulce ya que cuando se completaban las 2 horas y media fueron embestidos por el Ferrari No 62 que entró tarde a la zona llamada Bus Stop, con consecuencias graves para el Ligier JS P320 que en ese momento era conducido por Cassels.
Antes del incidente con el Ferrari, que fue sancionado con un drive through, Performance Tech se mantenía en un sólido primer lugar, Cassels imponía un ritmo espectacular y los planes eran de mantenerse fuera de esas escaramuzas de los autos más lentos.
Cuando Pier Guidi lanzó al Ligier contra la barda de protección, comenzó otra competencia para Performance Tech y comenzó el calvario ya que el auto sufrió daños en la suspensión y debieron llevarlo a los pits para repararlo por más de una hora tiempo en el que no solo perdieron la posibilidad de ir por el triunfo, sino que tendrían que adaptarse a un auto completamente diferente.
“Un incidente con el Ferrari número 6 marco la carrera para nosotros y lo que quedó fue ir de frente y pelear por recuperar el terreno perdido. Fue intenso y aprendí mucho de esta carrera en la que manejé mas de 6 horas algo que no había hecho anteriormente”, indicó el guatemalteco.
Los mecánicos hicieron magia, levantaron el Ligier, pero se conduciría de forma diferente y fue donde salió a relucir el talento de los corredores que lo llevaron hasta la línea de meta con grandes dificultades.
Una carrera de 24 horas es una aventura en donde nada está escrito, en donde el factor tráfico juega un papel relevante ya que en este caso entrar a una curva muy complicada contra otro rival que venía fuera de su línea de carrera marcó el destino de un equipo llamado a ser protagonista.
Con el destino fuera de sus manos el equipo comenzó a tratar de recuperar vueltas y a pensar en un papel digno. Cuando la noche entraba y en plenos fuegos artificiales, toda una tradición en Daytona, Mateo Llanera tomó su primer turno y lo hizo de forma magnífica ya que se quitó varios giros de encima y demostró que estaba listo para correr dos horas durante la noche.
La madrugada transcurrió sin sobresaltos y salvo algunas llamadas de atención sobre el desempeño del Ligier que por momentos pedía auxilio, luego de los golpes recibidos en la curva Bus Stop que fueron una herida que jamás sanó.
Con el alba, después de una noche de locura, Performance estaba cada vez más cerca de la meta de completar el desafío y a eso de las 5 de la mañana (hora de Guatemala), Mateo Llarena volvió subirse al auto para completar otras dos horas en las que logró imponer un buen ritmo y cuidar los neumáticos.
Dos horas antes del final Llarena tuvo otro turno siempre con la misión de llevar el auto lo más rápido posible y descontar vueltas.
El final del tiempo fue como un alivio para Performance que tuvo problemas para mantener en pista el auto, pero apeló a la confiabilidad del modelo Ligier JS P320 para cumplir las 24 horas.
La posición final fue sexta en la Categoría LMP3 y ahora piensan en la siguiente prueba que se llevará a cabo el 20 de marzo, las 12 Horas de Sebring, en donde está por confirmar su participación el piloto guatemalteco.